Te propongo sencillos cambios para ayudar a que tu negocio navegue viento en popa y a toda vela entre las aguas cada vez más revueltas del mercado.
La de tu negocio, la de tus colaboradores, la tuya propia... La primera impresión es la que cuenta, y la imagen que tiene de ti tu cliente condicionará para siempre la relación que tengáis en el futuro.
La vida es segun del color del cristal con el que se mire... ¿Y que reflejo transmite tu negocio? El cristal de una ventana se puede ver de dos lados. ¿Solo esta limpio por fuera o también por dentro?
Igual que los insectos a las bombillas encendidas, las personas nos acercamos a aquellas que desprenden luz. ¿Estas apagado o eres un foco led multicolor?
Si tu negocio no destaca por algo, se convierte en uno más de los muchos que se encuentran en el camino de los consumidores. ¿Te elegiran a ti?
Llega a tus clientes de todas las formas posibles, porque tu negocio no puede tener tan solo una puerta y una ventana al mundo.
¿Tienes claro tu objetivo? Si no sabes donde te diriges, cualquier camino es bueno. Pero nunca llegaras a tu destino.
Todos los días realizamos acciones de forma inconsciente, automática. Analizarlas supondrá optimizar las que funcionen y desechar las que aporten más bien poco.
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